DE DONDE VIENEN?

martes, 7 de junio de 2011

A veces llovía en el parque, y yo pensaba que era porque Dios estaba triste y lloraba. Tú me contabas no-se-qué del mar, el calor, las nubes y las montañas, y yo me reía. Ahora, sin embargo, creo mucho más en la tristeza y mucho menos en Dios. O me estoy volviendo loca, o toda la culpa es tuya. Tú mataste a mi Dios. ¿Y ahora en que puedo creer? ¿En quien puedo confiar? ¿Quién subirá conmigo en los ascensores para que no me muera?


Creo que desde siempre la lluvia fue hermosa, pero una muy mala idea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario